Psicología positiva: terapia central en el crecimiento personal y la resiliencia – Salud

Está comprobado científicamente. Terapia psicológica muy eficaz para la intervención en personas con problemas de salud mental. Produce resultados equiparables al tratamiento con psicofármacos, y sus efectos tienden a ser más duraderos.

La mayoría de estas psicoterapias sus tratamientos en los que se abordan problemas mediante la conversación. Sin embargo, existen diferentes formas de intención y abordar estas conversaciones terapéuticas, como veremos en este artículo.
La mayoría de las psicoterapias asumidas el modelo médico tradicional.

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Es decir, los profesionales actúan como expertos que diagnostican trastornos e intervienen sobre ellos. Buenos dias, las conversaciones psicoterapéuticas se centran en los problemas de quienes los sufren, con la idea de que los profesionales los resuelvan. Aunque el objetivo es que los pacientes superen sus problemas, la mayor parte de las sesiones se dedica a conversar sobre ellos.

Pero hay también plantaciones alternativas a esta visión. La más conocida es la psicología positiva, butizada come tal en el año 2000 por el entonces presidente de la Asociación Americana de Psicología, Martin Seligman. Este concepto retomó algunas de las propuestas humanistas de los años 50 y plantó que la psicología debía dar un giro. En vez de seguir centrándose en el sufrimiento debemos buscarse en el científico studio del bienestar, del crecimiento personal y de la resiliencia ante la adversidad.

Desde el punto de vista académico, la psicología positiva no está exenta de detractores, pero ha ido mostrando una abundante investigación científica. Entre sus aplicaciones prácticas están los programas de psicología positiva para las escuelas o las apps de felicidad. En el campo de la psicoterapia, a portea sobre toda una serie de ejercicios para quienes acuden a las consultas, centrados en la promoción de sus emociones positivas y de sus logros.

Un enfoque menos conocido pero que se ubica en una línea similar al centro de soluciones breves (TBCS), desarrollado a mediados de los años 80 por Steve de Shazer e Inso Kim Berg. Estos terapeutas familiares decubrieron que pudieron acortar la duración de las intervenciones si desde la premierra sesión ya accedieron a recursos de sus usuarios. Para ello preguntaban por las excepciones a los problemas y por las mejores producidas antes de la petición de consulta.

A estas conversaciones sobre los momentos en que las cosas funcionaban bien agregaron, unos años después, la técnica de la pregunta milagro. Con ella se invite a decribir en detalle cómo nos gustaría que ocurran las cosas en relación con lo que nos preocupa. Esta descripción del futuro géneros preferidos esperanza y permite que las personas vayan descubriendo posibilidades de cambio. En este sentido, el TCBS abordó la cara oculta de la luna: para analizar lo que no funciona y sus causas, pone el foco sobre lo que sí está funcionando y en construir nuevas posibilidades.

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terapia de mochila

El TBCS es un enfoque colaborativo, en el que los protagonistas del cambio son los propios pacientes. Los terapeutas no evalúan qué está mal ni determina qué deben hacer sus interlocutores, sino que fundamentan los objetivos de forma conjunta.

La tarea de los profesionales es colaborar con ellos y adaptar se a sus preferencias, sin perder el foco sobre sus fortalezas mediante el empleo estratégico de preguntas.
Un reciente estudio de nuevos equipos demostrará que la terapia breve centrada en las soluciones se ha extendido a más de tres países de los cinco continentes. Además, aplique mucho más allá del campo de la terapia familiar en el que surgió.

Hoy en día no hay solo psicoterapia centrada en soluciones o trabajo social centrado en soluciones, sino también intervención comunitaria, consultoría organizacional o intervención escolar basada en esta estrategia.

En el campo psicoterapéutico, la plantación centrada en soluciones trajo un modelo apto para la intervención que ha generado evidencia científica a nivel mundial con ensayos clínicos que muestran la efectividad del modelo en su conjunto, pero también la de algunas de sus técnicas en concreto. Los métodos técnicos pueden utilizarse también integrados en otros modelos de psicoterapia más conocidos, como la terapia cognitivo-conductiva.

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La mayoría de las herramientas del TBCS tienen aplicación en la vida cotidiana. Hablar desde los recursos actuales y las posibilidades futuras genera conversaciones más constructivas que estar dando vueltas a los problemasas. A continuación ofrecemos algunas pautas lingüísticas que pueden ser útiles para abordar dificultades personales, problemas de relación o conflictos:

Para resolver su problema o dificultad, si quiere arreglar su objeto, necesita saber qué hacer. Plantéese esas metas en positivo en vez de hacerlo en negativo. Mejor «mantener mi peso» que «no aumentar mi peso»; mejor «discutir forma tranquila» que «discutir sin gritarnos»; mejor «sonreír por la mañana» que «no llorar por las mañanas».

Si da alguna instrucción o negotia alguna norma, hágalo también en positivo. «Quédate sentado» mejor que «No te levantes»; «Hablemos bajito» mejor que «No hablemos tan alto».
Utilice en las conversaciones abiertas («¿Qué mejoras ha notado?», «¿Qué es lo que más le ha gustado?») en vez de cuestiones cerradas («¿Ha notado mejoras?», «¿Le ha gustado?» ). Las preguntas cerradas, que se contestan con un sí o con un no, tienden a matar la conversación.

Ante un atasco personal, profesional o familiar, dé menos vueltas a “¿por qué me pasa eso?”. Trate, en cambio, de dar una respuesta a las preguntas «¿cómo me gustaría explicar qué cosas?» y «¿qué puedo poner de mi parte para acercarme a eso que quiero?».

Si habla de algo negativo, utilice el todavía («Veo que todavía no ha resuelto el problema») en vez de descripciones estáticas («Veo que no ha resuelto el problema»). Pruebe estas sencillas propuestas… ya que se fije en qué efecto tiene sobre usted y sobre los demás dialogar «sobre el otro lado de la luna».

MARCA BEYEBACH

LA CONVERSACIÓN (**)

Catedrático del Departamento de Ciencias de la Salud de la Universidad Pública de Navarra. (**) Es una organización sin ánimo de lucro que busca compartir ideas y conocimientos académicos con el público. Este artículo se reproduce bajo una licencia Creative Commons.