Los consejeros delegados de Siemens Gamesa, Jochen Eickholt, y de Siemens Energy, Christian Bruch, han mantenido este viernes en Madrid una reunión con una delegación de UGT FICA y otra de CCOO Industria para iniciar el contacto al más alto nivel y concretar con más precisión la información trasladada por esta compañía en el Capital Market Day. Durante esa jornada de información para inversores, celebrada esta misma semana, Siemens Energy anunció que su filial española, dedicada a la fabricación de aerogeneradores, aplicará un recorte de 436 millones de dólares (400 millones de euros) hasta 2026 para poder regresar a beneficios ese año. Tras la reunión, los representantes de UGT, encabezados por el secretario general de FICA, Mariano Hoya, han “apreciado signos positivos por parte de Siemens”, pero han añadido que siguen teniendo “serias dudas sobre sus planes en España”, sobre todo en materia de empleo.
La compañía alemana tampoco ha aclarado estas dudas. “La eólica sigue siendo un pilar importante para la transición energética y requerirá tanto del negocio terrestre como del marino. Ahora tenemos que cambiar el rumbo del negocio eólico, solucionar nuestros problemas de calidad y volver a la rentabilidad lo antes posible”, apuntan fuentes de Siemens Energy. Y añaden: “La rentabilidad es la base de un entorno laboral estable y seguro. España es y seguirá siendo un país importante para nuestra empresa, ya que Europa es uno de nuestros mercados más relevantes”.
Ante la ausencia de concreción respecto a los planes de reestructuración de la filial española, los representantes de UGT han exigido a la matriz de Siemens Gamesa en un comunicado que garantice el empleo “tanto en las plantas industriales, oficinas, en operación y mantenimiento, como en las empresas proveedoras”. Según han informado, la dirección de la compañía alemana “ha ratificado por su apuesta por el Onshore [energía eólica terrestre] en Europa, algo que debería asegurar la continuidad del negocio en España”.
Asimismo, han trasladado a los representantes de UGT y CC OO que esperan que los problemas de la turbina SG5x estén solucionados en breve, lo que conllevará la reactivación de su fabricación y venta. En ese sentido, la empresa les ha transmitido que que la fabricación para el mercado europeo de eólica terrestre estaría en España. No obstante, la compañía mantiene su intención de “adaptar la estructura del negocio con el objetivo de cubrir las áreas de crecimiento con recursos internos”. Y cita como ejemplo que “el área de Offshore [eólica marítima] tiene un gran potencial de crecimiento que demandará recursos que podrán venir de otras áreas de la compañía”.
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Ayuda del Gobierno español
Tras el encuentro de este viernes, CCOO Industria, UGT FICA y la dirección de la compañía se han emplazado “a trabajar en una propuesta para garantizar el empleo en España con el objetivo de llegar a un punto de acuerdo sobre un compromiso firme”. En este sentido, los responsables sindicales aseguran que no renunciarán a seguir en contacto con el Gobierno de España —que tiene a Jordi Hereu, como nuevo ministro de Industria—, que se ha implicado en el objetivo de dar continuidad a la plantilla de Siemens Gamesa y al conjunto de sus proveedores.
Los últimos tiempos han sido particularmente convulsos para la división de aerogeneradores. Tras años de problemas financieros, que lejos de mitigarse han ido a más, el Gobierno alemán anunció a mediados de noviembre un rescate de 7.500 millones de euros en forma de avales, para poder hacer frente a su enorme cartera de pedidos. Las autoridades españolas también han mostrado su disposición a sumarse al salvavidas a través del Cesce (Compañía Española de Seguros de Crédito a la Exportación, con mayoría de capital público), aunque los detalles aún no han sido confirmados. El mantenimiento del empleo se antoja clave.
Paradójicamente, la fuerte demanda de aerogeneradores no se está traduciendo en números verdes para la mayoría de fabricantes occidentales. Por dos motivos, básicamente: el encarecimiento de las materias primas respecto al momento en el que firmaron buena parte de los contratos y la competencia de sus pares chinos, también muy avanzados tecnológicamente y más económicos. En el caso de Siemens Gamesa, se suma un tercer motivo: los problemas en el diseño de algunos modelos, que han llevado a la empresa a las mayores pérdidas de su historia.
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