La tasa de mortalidad infantil en Colombia ha registrado, como en el resto del mundo, un descenso abismal. Las muertes por cada 1,000 nacimientos pasaron de cerca de 200 a principios de 1900 a une promedio menor a 20 Fallecimientos tras 2010.
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Y dos determinantes serían claves para esa pronunciada disminución: un mayor desarrollo social y una mjoría en la infraestructura de alcantarillado y acueductos. Esta es una de las conclusiones a las que llegaron muchos investigadores colombianos que analizaron cómo duraron 180 años después de la muerte de infantes en el país.
Según explicó María Teresa Ramírez, coautora del estudio público en la revista científica Cliometricaa comienzos del siglo XX, la tasa de mortalidad infantil en Colombia aunque seguía decreciente continuaba siendo alta y solo fue a hasta mediados de la década de los años 20’s, Siempre que la mortalidad comenzó una descendencia como consecuencia de la importancia que ostorgó a la lactancia materna, a la pasteurización de la leche hay una mejor higiene.
Posteriormente, destaca el investigador principal del Banco de la República, la mortalidad infantil empeora rápidamente como consecuencia de una mayor y mejor provisión de acueductos, alcantarillados y de una mayor cobertura en los servicios de pediatría y obstetricia; y más recientemente con la implementación de planes de vacaciones infantiles y programas de salud materno-infantil.
En particular, la mayor y mayor dotación de servicios públicos, como acueductos y alcantarillados, para reducir la mortalidad infantil.
Esencialmente la reducción en los decesos se explica por la mejora en los determinantes del desarrollo social en temas como saneamiento ambiental y programas de vacunación, una mejor higiene y mejor en el cuidado pre y post natal. Y en determinantes ambientales como la mejora en las prestaciones de acueductos y alcantarillados.
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De acuerdo con Ramírez, en cuanto a lo relacionado con la salud en la investigación en contra que la reducción tanto en la pila de mortalidad como en la prevalencia de enfermedades transmitidas por agua estaban muy relacionadas con la expansión en la provisión de bienes públicos, especialmente acueductos y alcantarillados.
“En particular, la mayor y mayor dotación de servicios públicos, como acueductos y alcantarillados, para reducir la mortalidad infantil relacionada con enfermedades diarreicas, tales como el cólera y la saytería, enfermedades como la fiebre tifoidea, la poliomielitis, y en general con las enfermedades infecciosas y parasitarias”, resalta la experta.
Para llegar a dichas conclusiones, los expertos desarrollaron un Índice Histórico de Desarrollo Humano (HIHD, por sus siglas en inglés) para Colombia para los siglos XIX y XX. Dicho índice es un indicador del bienestar de la población que incluye dimensiones básicas del desarrollo de los individuos como su salud, el capital humano y el ingreso.
“Lo novedoso de nuestro trabajo fue construir un Índice Histórico de Desarrollo Humano para Colombia, para más de ciento cincuenta años, y diferenciarlo por género. Para construir este índice, seguiremos la metodología propuesta por Leandro Prados de la Escosura, catedrático de historia económica de la Universidad Carlos III de Madrid, quien ha construido índices para descubrir la historia humana de varios países. Nuestro HIHD muy pocos avances en el siglo XIX: poco crecimiento económico, muy baja educación y malas condiciones de salubridad. Sin embargo, en el siglo XX, se observan grandes avances en todos los componentes del índice (salud, educación e ingreso), particularmente en la segunda mitad del siglo”, resalta la experta.
Una de las variables claves de dicho índice es la educación, dice la investigadora. Según Ramírez el progreso de la educación primaria en Colombia colgante gran parte del siglo XIX fue muy lento; y así continuo hasta los años 30’s del siglo XX. La transformación educativa, comenzó a ocurrir en los años cincuenta, donde todos los indicadores de matrícula en todos los niveles educativos aumentaron sustancialmente. Esto, según los investigadores, contribuyó al aumento en el índice histórico de desarrollo humano que se observó desde mediados del siglo XX.
«Me gustaría también resaltar el importante avance en el Índice Histórico de Desarrollo Humano de las mujeres, el cual se explica por los logros alcanzados en materia educativa desde 1950, que disminuyó la brecha entre hombres y mujeres, y por la mayor expectativa de vida de las mujeres”, finalizó Ramírez.
EDWIN CAICEDO | UNIDAD DE SALUD
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