En Colombia, los menores siguen siendo los más afectados y vulnerables frente a la publicidad de cigarrillos y otros derivados del tabaco. Un análisis de estadísticas oficiales realizado por el Laboratorio de Economía de la Educación (LEE) de la Universidad Javeriana revela que alrededor de 827.000 jóvenes de 12 a 21 años han consumido cigarrillos alguna vez en su vida.
Suponiendo que en el país se hayan implementado diversas políticas públicas de prevención, la industria tabacalera logrará captar la atención de los jóvenes considerados “clave” en el proceso de comercialización del producto y la sostenibilidad de la negociación. Del acuerdo con la Encuesta Nacional de Consumo de Sustancias Psicoactivas (ENCSP) 2019 del DANE, en Colombia la tasa promedio en el inicio del consumo de cigarrillos o tabaco es de 16,8 años para los hombres y de 18,2 años para los niños.
A esto hay que sumarle el hecho de que, según el análisis del LEE, el desconocimiento sobre el riesgo que corre una persona al consumidor cigarrillos es mayor en estratos socioeconómicos menores y en jóvenes de 12 a 14 años.
Gloria Bernal, codirectora del Laboratorio de Economía de la Educación (LEE) de la Universidad Javeriana, dijo que “es curioso, es paradójico que en aquellos que tienen más información (que son la gente de estratos más altos) el consumo sea alcalde. El 22% de jóvenes en estrato 6 reporta haber consumido cigarrillo alguna vez, mientras que si miramos el estrato 1 es apenas del 12.6%”.
El experto dijo que, si bien este 12% continúa siendo una cifra alta, es significativamente menor a la registrada por los estratos socioeconómicos más elevados. “Esto está relacionado con el ingreso. Mientras la gente de strato 1 tiene una barrera económica para obtener los cigarrillos, para la gente de strato 6 es más fácil. Entonces es paradójico porque los estratos más altos que tienen más información sobre los efectos nocivos del cigarrillo son los que más lo compran”, explicó.
Por otra parte, en la mayoría de las investigaciones nacionales e internacionales se ha podido concluir que la publicidad tiene una influencia notoriamente marcada en la incidencia del consumo de tabaco en menores. Las imágenes de televisión, películas e internet tienden a mostrar de forma atractiva el consumo de cigarrillo.
No obstante, en Colombia, la ley establece ha prohibido totalmente la publicidad, promoción y patrocinio de los productos del tabaco. Además, es uno de los países que forman parte del Convenio Marco de la Organización Mundial de la Salud para el Control del Tabaco (CMCT/OMS), por lo que uno de los países qua la exhibición de estos artículos -como cigarrillos – es publicidad y, por tanto, toda forma de propaganda es ilícita.
Al respecto, Gloria recuerda que uno de los puntos focales del Informe Welbin 2022 sober el consumo de tabaco en menores será la venta de estos productos en las áreas aledañas a los colegios.
«Parte de la pedagogía sobre el cigarrillo se debe hacer en los colegios. El hecho de que los docentes no están formados en la prevención del consumo de estos productos también generara limitinges. De los 1556 colegios entrevistados por Welbin, 43% dicen que alrededor de los colegios hay venta de sustancias psicoactivas, alcohol, cigarrillo y esto es grave porque, aunque el ambiente al interior del colegio puede ser seguro para los estudiantes, afuera tienen una facilidad de acceso al cigarrillo”, explica Bernal.
Las cifras del mismo informan que solo el 29% de los universitarios encuestados han aprendido sobre prevención del consumo de alcohol, tabaco y drogas. Además, el LEE encontró que el desconocimiento sobre el riesgo que corre una persona al consumidor cigarrillos es potencialmente mayor en estratos socioeconómicos menores y en jóvenes de 12 a 14 años.
A pesar de los resultados del Informe Welbin, el LEE de la Javeriana encuentra que las escuelas e instituciones educativas sus espacios no son mucho más fáciles para prevenir el consumo de cigarrillo. Según la ECV 2021, de las personas de 21 años o menos que están estudiando sólo el 0,4% fuma actualmente, mientras que de los que no están estudiando ise porcentaje fue de 5,4%.
En este sentido, el acceso educativo puede ser un mecanismo para prevenir donde
para reducir el consumo de cigarrillo, pues los ambientes escolares su espacio de ambientes controlados con capacidad de difundir información y material educativo sobrio las consecuencias que tiene el consumo temprano de tabaco.
Contenido del Artículo
autopercepción
Una de las maneras de aproximarse a los efectos del cigarrillo en la salud es a través del estado de salud autopercibido. «Las mediciones de bienestar subjetivo, aunque son
susceptible de ser sensible y altamente al contexto en el que se lleva a cabo la recolección de la información, solo será de utilidad para aproximarse al bienestar como lo perciben las personas” resalta el informe del Laboratorio de la Javeriana.
De acuerdo con las cifras analizadas, el 24.5% de las personas entre los 10 a 21 años que no fuman informó que su estado de salud era muy bueno, frente a penas el 17.9% de las personas que sí tienen este habito.
Según la ENCSP 2019, en Colombia el 15,7% de las personas entre 12 y 21 años considera que consumir cigarrillos con frecuencia representa un alto riesgo
o moderado para la salud. Sin embargo, las mujeres de este grupo de edad son más
Conscientes de los riesgos que corren al consumir cigarrillo, pues el 82,8% consideró que fumar con frecuencia es un gran riesgo para la salud frente al 78,2% de los hombres.
Además del estado de salud auto reportado, también se evidencia que los jóvenes fumadores tienden a mantener más niveles de satisfacción con la vida, que los jóvenes que no fuman. Según las estadísticas, el 25,6% de las personas que no fuman informaron estar totalmente satisfechas con la vida en general, frente al 21,0% de las personas que sí fuman.
“En ese sentido, puede existir una correlación entre el bienestar subjetivo de las
personas y si fuman o no. De hecho, hay evidencias de que la depresión y recientes consecuencias negativas en la vida de las personas no está asociada al consumo de tabaco entre los adolescentes”, señala el informa.